De comienzo a fin, el Proyecto es nuestro compromiso
De comienzo a fin, el Proyecto es nuestro compromiso
Desde la firma del Decreto 420 de 2014, el Plan Parcial de Renovación Urbana Triángulo de Fenicia se embarcó en un arduo trabajo en conjunto con la comunidad de Las Aguas y sus alrededores. Hoy, casi ocho años después, la aceptación de la mayoría de la comunidad, nos mantiene comprometidos con nuestro trabajo y vemos un próximo 2023 lleno de objetivos.
Aparecen en la foto: Natalia Gil González, Johnny Tascón Valencia y Jessica Ballesteros Parrado.
Una de las primeras reuniones a las que asistió Johnny Tascón Valencia, arquitecto urbanista y asesor del Proyecto desde el 2015, fue con los asesores jurídicos, financieros, sociales y gerenciales del Plan Parcial con la gerencia de la Universidad de los Andes. Corría el año 2015 y el Plan Parcial iniciaba la preparación del proceso de definición de las Bases para la Actuación. Un proceso que actúa como las reglas y condiciones de vinculación, aporte y participación en el Proyecto. Dicho proceso terminó en cada una de las cinco Unidades de Actuación Urbanística (UAU) el pasado 28 de febrero de 2022, con una aceptación del 87,5% del suelo. “Para mí es muy emocionante y un honor hacer parte de un proceso de renovación urbana que se diferencia de todos los que se han hecho hasta ahora. Pero también es un reto interesante por todas las aristas que tiene”, dice Johnny.
Haber logrado este porcentaje de aceptación significa que todos los inmuebles que hacen parte del Proyecto tuvieron la suficiente información acerca del Plan Parcial y la mayoría quiere o está de acuerdo con una renovación urbana en Las Aguas. Jessica Ballesteros, socióloga y gestora social del Proyecto desde el 2018, trabaja con la comunidad muy de cerca y asegura que conocer la realidad de las personas de Las Aguas la motiva cada día. Dentro de sus labores está brindar la información necesaria y efectiva para poder encontrar el camino más corto por todas las instituciones distritales creadas para la solución de problemas de corte infraestructural y social. “Este Programa tiene una característica única – estar de cara a la comunidad. Logra recibir las problemáticas y dinámicas sociales, desde las más sencillas a las más complejas, y decide atenderlas, gestionarlas y apoyarlas. Por lo general, las universidades son como un muro muy difícil de atravesar para los habitantes de un sector. Aquí la comunidad tiene un punto a dónde ir y encontrar una cara, no un correo electrónico. Encuentran un ser humano que atiende y escucha las problemáticas: la caída de un poste, el incendio de una casa, un hueco o la falta de una alcantarilla”, relata Jessica.
Por su parte, la Universidad como promotora del Proyecto, se propuso desde el comienzo hacer este proceso de manera participativa. Para Natalia Gil González, asistente del componente social del Programa Progresa Fenicia, la participación de la comunidad en esta clase de proyectos urbanísticos es innovadora, “la Universidad lo hace así porque cree genuinamente que es posible desarrollar la ciudad de manera sostenible y tiene una convicción muy clara sobre la importancia de hacerlo con la gente conjuntamente”, dice Natalia.
Este año hemos tenido reuniones con algunos vecinos y revisamos detalladamente el porcentaje de inmuebles que permanecen como renuentes (el 12,5% del suelo), por lo general, son personas con complicaciones de titularidad o que aún tienen dudas frente al Proyecto. Gestionar la renuencia requiere mucho más tiempo de trabajo con la comunidad y por ello hacemos una vez más la invitación a que se acerquen a nuestros puntos de información para retomar conversaciones y solucionar sus inquietudes, “nosotros trabajamos para ustedes, hacemos todo lo que hacemos pensando siempre en el bienestar de cada una de las familias”, añade Natalia.
Por estas razones para Jessica el Plan Parcial es una gran oportunidad para mejorar el estilo de vida de la comunidad de Las Aguas, “muchas personas que jamás cotizaron una pensión y ven en el Plan Parcial una oportunidad de poder valorar su patrimonio y pensar en una pensión. También es una oportunidad para muchos abuelos que hoy esperan darle algo a sus nietos. Sobre todo, esta es una oportunidad única en la ciudad de poderle dar a las personas que viven en condición de ocupación, un apartamento propio”, señala Jessica.
Todas las vecinas y vecinos han estado presentes en cada una de las etapas de desarrollo del Proyecto desde el 2014 hasta hoy. Algunos hicieron parte del grupo de ciudadanos que ayudaron a redactar el Decreto 420 de 2014. Muchos hicieron parte de los talleres de diseño participativo que hoy hacen parte de los planos del Plan Parcial. Lo que hemos logrado es valioso y ha implicado tiempo, y sigue siendo parte de un ejercicio de construcción participativa de ciudad y de ciudadanía único en Colombia y en el mundo. ¡Sigamos trabajando y haciendo parte de esto juntos!